Consejos De Hidratación Para Niños De Cara A La Temporada De Calor

A medida que los niños vuelven a realizar actividades al aire libre, una preocupación común entre los padres es si sus hijos están recibiendo suficientes líquidos para mantenerse seguros antes el calor.

Después de un largo período de cuarentena, y considerando las altas temperaturas, es fundamental conocer cómo mantener hidratados a los niños


A medida que los niños vuelven a realizar actividades al aire libre, una preocupación común entre los padres es si sus hijos están recibiendo suficientes líquidos para mantenerse seguros antes el calor. Es importante mantener a los niños hidratados - ¡pero no siempre es fácil! – existen muchos consejos de hidratación para asegurarse que de sus hijos puedan jugar seguros este verano.

Esto es lo que debes saber sobre cómo mantener a los niños hidratados, así como información sobre cómo saber cuándo necesitan ingerir más líquidos.

¿Qué significa “estar hidratados”?

Estar bien hidratado significa tener suficiente agua en su cuerpo para que todos sus sistemas puedan funcionar de manera óptima. La deshidratación es la condición de tener una cantidad de agua inferior a la ideal en su cuerpo.

Cuando una persona está deshidratada, puede sentirse débil o mareada, y puede tener dificultades para realizar tareas físicas y mentales. Si no se atiende, la deshidratación puede provocar problemas más graves, por lo que es importante que los padres vigilen la ingesta de líquidos de sus hijos.

Cuánto líquido necesita ingerir su hijo

La cantidad de agua que un niño necesita durante el día depende de su edad, nivel de actividad, su salud general, qué otras bebidas y alimentos consume, cuánto suda, la temperatura del aire y el nivel de humedad. Pero usted puede comenzar con una buena estimación de las necesidades de fluidos mediante el uso de la orientación proporcionada por su pediatra e información de organizaciones de salud de buena reputación.

“Si la cantidad de agua que su hijo necesita parece ser mucha, tenga en cuenta que parte del líquido que toma viene envasado dentro de las frutas y verduras que comen. A diferencia de la carne o los alimentos con almidón, los productos tienen un alto contenido de agua, por lo que cuanto más frutas y verduras come una persona, más agua toma durante sus comidas. Normalmente, obtenemos alrededor del 20% del agua que necesitamos de los alimentos que comemos”, comenta el Dr. Oscar Hincapie, Director Médico del negocio de nutrición de Abbott.

La pauta de ingesta diaria de agua en niños[1], indica lo siguiente:

  • De 2 a 5 años: 5 a 6 vasos de agua diarios.
  • De 6 a 10 años: 6 a 8 vasos de agua diarios.
  • De 11 a 18 años: 6 a 8 vasos de agua diarios.

Comprender los signos de deshidratación en niños

Su hijo en edad escolar puede mostrar varios signos de lo que se denomina deshidratación leve. El Dr. Hincapie comenta que “es importante prestar atención a sus síntomas y tomar medidas si nota que son inusualmente sedientos, cansados o irritables, respiran más rápido de lo habitual, tienen fiebre o rubor en la cara, y se quejan de que el ejercicio o el juego es más difícil de lo habitual”.

Agrega que “los niños (y los adultos) con deshidratación más avanzada pueden marearse o debilitarse, tener estreñimiento, dolor de cabeza o fatiga”. El cuerpo también proporciona otros signos, como la orina de color oscuro.

El color de la orina puede ayudar a medir la hidratación en niños

El color de la orina es un buen indicador del estado de hidratación. Una persona bien hidratada tendrá clara a la orina de color amarillo pálido, a menudo descrito como "color paja." La orina de color amarillo medio indica una necesidad de más líquidos, y la orina de color ámbar es un signo distintivo de deshidratación.

“Si la orina de su hijo es más oscura que el color ámbar, comuníquese con su proveedor de atención médica. Del mismo modo, si su hijo orina menos de cuatro veces en 24 horas, es importante buscar atención médica”, indica el Dr. Hincapie.

Prevenir la deshidratación

Ahora que sabe aproximadamente cuánto líquido necesita su hijo en un día, puede asegurarse de que se mantenga bien hidratado. Comience con la suposición de que su hijo está despierto y alerta durante al menos 12 horas al día. Luego, divida el número de vasos de líquido que su hijo necesita por 12.

Por ejemplo, si usted tiene una hijo/a de 14 años, normalmente necesita seis a ocho vasos de líquido al día de acuerdo con la información anterior. Ocho vasos al día divididos por 12 horas al día es un vaso de dos tercios por hora. Ahora está claro que ella necesita beber aproximadamente un vaso de dos tercios de líquido cada hora, 12 horas al día, para mantenerse hidratada - sin tener en cuenta cualquier entrenamiento intenso o deportes o pasar tiempo en calor extremo. Si se ejercita, necesitará líquido adicional, y si está sudando, también va a perder electrolitos críticos como el sodio y el potasio.

Para ayudar a prevenir la deshidratación cuando realice algún deporte o entrenamiento intenso, anímelo a beber el doble de su cantidad habitual de agua en las dos horas anteriores al juego.

“Si sospecha que un niño está ligera o moderadamente deshidratado, una solución de electrolitos puede proporcionar la combinación de líquido y electrolitos necesarios para la rehidratación rápida. Sin embargo, si su hijo está gravemente deshidratado, busque atención médica de inmediato porque la deshidratación avanzada que no se trata puede ser mortal”, comenta el Dr. Hincapie.

Ya sea que tenga un niño pequeño que ama estar en el patio o un adolescente que no puede esperar para presentarse a la práctica del deporte que le gusta, el uso de estos consejos debe ayudar a prevenir la deshidratación y mantener a su hijo listo para el juego del día siguiente. Especialmente en temporadas cálidas, es importante que los niños (y los adultos) consuman una cantidad adecuada de líquidos para mantener su salud y bienestar. Después de todo, no hay nada como una bebida fresca y refrescante en un día caluroso.

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